En un bowl colocar la harina y semolín, formar una corona y agregar el agua tibia.
Incorporar bien dentro del bowl, luego colocar sobre a una superficie enharinada y amasar unos minutos hasta obtener un bollo liso y parejo.
Cubrir y dejar descansar por 15 minutos a temperatura ambiente. Este es un descanso literal, la masa debe relajarse para poder trabajarla sin problemas.

Una vez descansada la masa, cortar un trozo de masa, cubrir y reservar el resto.
Con las manos dar forma de “chorizo” con un espesor de aproximadamente de un dedo.
Luego cortar trozos de 1 a 2 centímetros de ancho.
Ahora, nosotros damos forma con la “macchina per cavatelli”, pero se puede dar forma a mano con los dedos indice y medio (como lo mostramos en esta otra Receta de Cavatelli), hacer bastante presión sobre la masa y hacerla rodar hacia tu cuerpo. Tiene que quedar como un caracol casi cerrado y no muy grueso. También se puede utilizar la clásica Ñoquera. Repetir hasta utilizar toda la masa.
A medida que van tomando forma, colocarlos sobre una fuente enharinada y al terminar cubrir con un poco más de harina.

Ahora sólo queda hervir abundante agua en una olla amplia, añadir una pizca de sal y cocinar los cavatelli.
Una vez que flotan (luego de aproximadamente 3 a 5 minutos), colar y colocar sobre una sartén a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva.
Añadir la pasta de aceitunas, nueces y pimienta a gusto. Mezclar unos minutos para incorporar bien todo y servir!
A disfrutar! Un plato de pasta fresca, en minutos y super delicioso!